lunes, 4 de octubre de 2010

Operaciones concretas, 1ºA Juliana Lacassy, Isabel Pou, Andrea Britos.


Estadio de las operaciones concretas

De 7 a 11 años de edad. Cuando se habla aquí de operaciones se hace referencia a las operaciones lógicas usadas para la resolución de problemas. El niño en esta fase o estadio ya no sólo usa el símbolo, es capaz de usar los símbolos de un modo lógico y, a través de la capacidad de conservar, llegar a generalizaciones atinadas.
Alrededor de los 6/7 años el niño adquiere la capacidad intelectual de conservar cantidades numéricas: longitudes y volúmenes líquidos. Aquí por 'conservación' se entiende la capacidad de comprender que la cantidad se mantiene igual aunque se varíe su forma. Antes, en el estadio preoperativo por ejemplo, el niño ha estado convencido de que la cantidad de un litro de agua contenido en una botella alta y larga es mayor que la del mismo litro de agua trasegado a una botella baja y ancha (aquí existe un contacto con la teoría de la Gestalt). En cambio, un niño que ha accedido al estadio de las operaciones concretas está intelectualmente capacitado para comprender que la cantidad es la misma (por ejemplo un litro de agua) en recipientes de muy diversas formas.
Alrededor de los 7/8 años el niño desarrolla la capacidad de conservar los materiales. Por ejemplo: tomando una bola de arcilla y manipulándola para hacer varias bolillas el niño ya es consciente de que reuniendo todas las bolillas la cantidad de arcilla será prácticamente la bola original. A la capacidad recién mencionada se le llama reversibilidad.
Alrededor de los 9/10 años el niño ha accedido al último paso en la noción de conservación: la conservación de superficies. Por ejemplo, puesto frente a cuadrados de papel se puede dar cuenta que reúnen la misma superficie aunque estén esos cuadrados amontonados o aunque estén dispersos

ADOLESCENCIA.1ºA. JULIANA LACASSY.

La adolescencia es un continuo crecimiento de la existencia de los jóvenes, en donde se realiza la transición entre el infante o niño de edad escolar y el adulto. Esta transición de cuerpo y mente, proviene no solamente de sí mismo, sino que se conjuga con su entorno, el cual es trascendental para que los grandes cambios psicológicos que se produce en el individuo lo hagan llegar a la edad adulta. La adolescencia es un fenómeno biológico, cultural y social, por lo tanto sus límites no se asocian solamente a características físicas.
A diferencia de la pubertad, que comienza a una edad determinada a los doce o trece debido a cambios hormonales, la adolescencia puede variar mucho en edad y en duración en cada individuo pues está relacionada no solamente con la maduración de la psiquis del individuo sino que depende de factores psico-sociales más amplios y complejos, originados principalmente en el seno familiar.

Desde el punto de vista práctico, los cambios normales del crecimiento tienen tres grandes características:
  1. Se realizan en forma secuencial, es decir, aparecen unas características antes de que aparezcan otras, como es el caso del crecimiento de los senos antes de la aparición de la menstruación (o regla), el vello púbico antes que el axilar, los miembros inferiores crecen primero que el tronco, los testículos se incrementan antes que el pene, etc.
  2. El tiempo de comienzo, la magnitud y la velocidad de cada evento es considerablemente variable entre las edades, por lo que algunos maduran antes que otros, para cada sexo.
  3. Cada evento del crecimiento sigue la ley de la variabilidad individual del desarrollo. Cada individuo tiene una propia manera de ser y la conserva a través de los años de la adolescencia y en el que influyen diversos factores, como su raza, constitución genéticao familiar, nutrición, funcionamiento endocrino y ambiente socio-cultural. Basado en ello, la evaluación de la maduración sexual suele ser más valiosa desde el punto de vista clínico, que la edad cronológica, que es la correlación que por lo general preocupa a los padres y al mismo adolescente.

Peso

En las mujeres, durante la pubertad temprana, la ganancia de peso continúa siendo 2 kg por año, pero luego experimenta una aceleración que llega a un máximo después de alcanzar el punto de velocidad máxima de crecimiento. En los varones el peso coincide con la talla, es decir, de 100 a 200 g. por año.El aumento de peso puberal viene a representar el 50% del peso ideal del individuo adulto.

Grasa

La grasa corporal total aumenta en la pubertad temprana para ambos sexos. Más adelante las niñas depositan grasa más rápida y extensamente que lo hacen los varones, con predominio en miembros superiores, tronco y parte superior del muslo. En condiciones normales, en ningún momento de la pubertad se espera que las niñas pierdan grasa, mientras que los varones en el crecimiento rápido, pierden grasa en los miembros y el tronco.
La mujer y el varón prepuberales tienen igual proporción entre masa magra—tejido muscular, huesos y visceras—y tejido adiposo. En el varón, el aumento de la masa magra es paralelo al incremento de la talla y del estirón puberal en músculos y huesos los cuales coinciden con el punto de velocidad máxima (PVM) de crecimiento. Por el contrario, en las niñas, se continúa acumulando el tejido adiposo en las extremidades y el tronco. Este crecimiento divergente da como resultado que los hombres tengan hasta un 45% de su peso corporal en músculos y las mujeres hasta un 30% de su peso corporal en grasa. Al final de la pubertad, los varones son más pesados que las mujeres. El dimorfismo es muy importante para considerar el sobrepeso en el adolescente, ya que se debe determinar si es a expensas de tejido graso o tejido magro. Los hombros y el tórax son más anchos que las caderas en el varón y a la inversa en las mujeres y, en relación al tronco, las piernas son más largas en el varón.

Cabeza

La cabeza aumenta muy poco en tamaño, pero la cara se diferencia tomando aspecto de adulto, sobre todo por el reforzamientomandibular, muy evidente en el varón y por los cambios en la nariz. Bajo las influencias de los andrógenos se establece también una diferencia en la parte anterior del cartílago tiroides y las cuerdas vocales que tienen el triple de longitud que en las niñas.

Crecimiento muscular

El crecimiento muscular es un hecho resaltante, especialmente mientras dura el estirón de la estatura, con predominio en el varón, sobre todo por la acción de los andreogenos que también influyen en la adquisición de la fuerza muscular. Por supuesto, el tamaño, la fuerza y la habilidad pueden no ser diferentes en un varón y una mujer, dependiendo de la actividad física que desarrollen. El corazón y los pulmones también participan en el estirón del adolescente, más marcadamente en los varones, en quienes aumenta la presión arterial, así como la capacidad sistólica.

Maduración sexual

Adolescentes chinos vistiendo ropa tradicionalHanfu.
En la adolescencia temprana y para ambos sexos, no hay gran desarrollo manifiesto de caracteres sexuales secundarios, pero suceden cambios hormonales a nivel de lahipófisis, como el aumento en la concentración de gonadotropinas (hormona foliculostimulante) y de esteroides sexuales. Seguidamente aparecen cambios físicos, sobre todo cambios observados en la glándula mamaria de las niñas, los cambiosgenitales de los varones y el vello pubiano en ambos sexos.5

Mujeres

El primer cambio identificable en la mayoría de las niñas es la aparición del botón mamario. La adolescencia en las mujeres comienza a los 10 o 12 años.
Se caracteriza por un agrandamiento en el tejido glandular por debajo de la areola, consecuencia de la acción de los estrógenos producidos por el ovario. La edad de aparición es después de los 8 años puede ser unilateral y permanecer así por un tiempo bilateral y casi siempre es doloroso al simple roce. Al avanzar la adolescencia, el desarrollo mamario, además de ser cuantitativo es cualitativo, la areola se hace más oscura y grande y sobresale del tejido circundante, aumenta el tejido glandular, se adquiere la forma definitiva, generalmente cónica y se desarrollan los canalículos. Puede haber crecimiento asimétrico de las mamas.
El vello púbico, bajo la acción de los andrógenos adrenales y ováricos, es fino, escaso y aparece inicialmente a lo largo de los labios mayores y luego se va expandiendo. El vello púbico en algunos casos coincide con el desarrollo mamario y en otros puede ser el primer indicio puberal. Típicamente comienza a notarse a los 9 o 10 años de edad. Al pasar los años, el vello pubiano se hace más grueso y menos lacio, denzo, rizado y cubre la superficie externa de los labios extendiendos hasta el monte de Venus, logrando la forma triangular característica adulta después de 3 a 5 años (más o menos entre los 15 y 16 años de edad). El vello axilar y corporal aparece más tarde.
Los genitales y las gónadas cambian de aspecto y configuración. Los labios mayores aumentan de vascularización y en folículos pilosos, hay estrogenización inicial de la mucosa vagina, los ovarios y el cuerpo del útero aumentan en tamaño. Las trompas de Falopio aumentan después de tamaño y en el número de pliegues en su mucosa. Los labios menores se desarrollan, los labios mayores se vuelven luego delgados y se pigmentan y crecen para cubrir el introito. La vagina llega a 8 cm de profundidad y luego de 10 – 11 cm. Por efectos estrogénicos, la mucosa se torna más gruesa, las células aumentan su contenido de glucógeno y el pH vaginal pasa de neutro a ácido un año antes de la menarquia. Se desarrollan las glándulas de Bartolino, aumentan las secreciones vaginales, la flora microbiana cambia con la presencia del bacilo de Doderlein, la vulva sufre modificaiones en su espesor y coloración, el himen se engruese y su diámetro alcanza 1 cm.
La menarquia, que es la primera aparición del ciclo menstrual, aparece precedida por un flujo claro, inodoro, transparente y bacteriológicamente puro que tiene aspecto de hojas de helecho al microscopio. La menarquia tiende a ocurrir a los 11 o 12 años, aunque puede aparecer en la pubertad avanzada.(8-10 años).

Hombres

Los testículos pre-puberianos tienen un diámetro aproximado de 2,5 a 3 cm, el cual aumenta obedeciendo a la proliferación de lostúbulos seminíferos. El agrandamiento del epidídimo, las vesículas seminales y la próstata coinciden con el crecimiento testicular, pero no es apreciable externamente. En el escroto se observa un aumento en la vascularización, adelgazamiento de la piel y desarrollo de los fulículos pilosos.
La espermatogénesis es detectada histológicamente entre los 11 y 15 años de edad, y la edad para la primera eyaculación oespermarquia es entre 12 y 16 años. El pene comienza a crecer en longitud y también a ensancharse aproximadamente un año después de que los testículos aumenten de tamaño. Las erección|erecciones son más frecuentes y aparecen las polución nocturna|emisiones nocturnas.
El vello sexual aparece y se propaga hasta el pubis, más grueso y rizado. Puede comenzarse el vello axilar y en ocasiones, el ocasiones en el labio superior. El vello en los brazos y piernas se torna más gruesos y abundantes alrededor de los 14 años de edad. Aumenta la actividad (glándula suprarrenal|apocrina) con aparición de humedad y olor axilar, igual que el acné.

Operaciones concretas: Diversidad y organización de las operaciones

Publicado por MARIANA CARRERAS.
Si cualquier acción interiorizada integrada en un sistema de relaciones es una operación, psicologicamente existirá una gran variedad de operaciones según el ámbito de aplicación por ejemplo: La operación de reunión puede aplicarse a clases, o a relaciones, o a números. Estas operaciones pueden aplicarese en el ámbito lógico-matemático, o infra-lógico "espacio temporal".
Piaget va a distinguir diversas operaciones: El niño va ser interrogado por el experimentador-
-Clasificación: Ante un material diverso, se le pide al niño que agrupe los elementos que van juntos.
-Seriación: El niño ha de ordenar bastoncillos de diferentes tamaños, desde el más pequeño al mayor.
-Conservación numérica: Se le pregunta al niño si continúa habiendo el mismo número de elementos en dos colecciones cuando la disposición de éstos se modifica.
-Adicción partitiva: Se le pregunta al niño si, al disolver un terrón de azúcar en el agua, la cantidad de líquido y su peso permanece o no idéntico.
-Orden espacial: Un bastoncillo con tres perlas fijadas en él sufre una relación; se le pregunta al niño el orden de aparición de las perlas después de la rotación.
-Medición: El niño ha de constituir, con diversos elementos, una torre de igual altura que una torre modelo, estando esta última sobre un zócalo que impide una correspondencia directa entre ambos.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Operaciones concretas- De La Intuición a la Operación

La de seis años puede parecer una edad algo mágica: desde siempre se ha considerado como el inicio de una fase intelectual nueva, fase que hasta los inicios de la adolescencia parece constituir un período de relativa tranquilidad afectiva; es también la edad que suele coincidir con el inicio de la escolaridad obligatoria. El pensamiento se vuelve verdaderamente lógico. Según Piaget, la inteligencia sigue siendo una marcha progresiva hacia una mayor adaptación en la que la asimilación y la acomodación juegan un papel primordial en el intercambio entre el sujeto y el entorno.
En este sentido, la operación prolonga de manera muy directa lo que el niño era capaz de hacer a los 5-6 años cuando conseguía articular intuiciones diferentes.
El niño de 5-6 año necesita, actuar de manera efectiva sobre las cosas; puede representarlas y actúa sobre la realidad de manera mediatizada.
El sujeto sigue "operando" sobre la realidad(la transforma, la cambia) pero lo que es propio de la operación es que es una acción interiorizada integrada en un sistema.
Esta propiedad de poder integrarse en un sistema concede al pensamiento operatorio un equilibrio que está ausente en el pensamiento intuitivo.
El pensamiento operatorio ya no es victima del aspecto cambiante de la realidad, pues la posibilidad de convinación e integración de las representaciones ofrece un cuadro estable en el que los diferentes elementos se complementan y se integran.
Piaget hace también notar que este equilibrio es más móvil que el del pensamiento intuitivo., en vez de quedar fijo en las configuraciones estáticas, es un equilibrio que resulta de intercambios convinaciones y compensaciones.

Enzo Spinelli-Berenice Olivera 1ero.B

martes, 14 de septiembre de 2010

Las etapas del desarrollo del niño

Publicado por MARIANA CARRERAS
Durante la primera etapa de su vida tiene una gran necesidad de seguridad, por lo que hay que rodearle de un ambiente estable y afectivo donde pueda alcanzar el máximo de sus posibilidades.
El crecimiento es un fenómeno continuo y cada fase prepara la siguiente, por ello es muy importante actuar adecuadamente en cada momento.
El desarrollo del niño constituye un proceso global; el niño crece físicamente y, al mismo tiempo, se desarrolla intelectual, social y afectivamente.
ETAPAS:
1. El recién nacido: los principales cuidados se refieren a la alimentación; a la prevención de las infecciones y de las llamadas enfermedades infectocontagiosas infantiles, que se previenen con una limpieza cuidadosa de todo lo que tenga contacto con el niño. Asimismo es importante, en relación con la higiene, cambiarle frecuentemente. Durante el primer año:
EDAD (meses)    ACTIVIDAD
Nacimiento             Mama
1                            Sonríe
2                           Vocaliza
3                    Controla su cabeza
4                    Controla sus manos
5                    Gira sobre sí mismo
6                   Se sienta poco tiempo
7                           Gatea
8                          Agarra
9                        Se levanta solo
10                   Camina con ayuda
11                   Se sostiene de pie solo
12                       Camina solo
2. La edad preescolar: el niño avanza en un proceso intelectual. El niño va entendiendo mejor el tiempo, el espacio, la cantidad, el azar y coordina mejor sus movimientos. En esta etapa investiga el ambiente que le rodea pero tiene una visión limitada y como característica esencial aparece el egocentrismo. En esta etapa se produce también el proceso de socialización a la vez cognoscitivo, afectivo y moral. El niño en preescolar es capaz de utilizar la palabra para expresar símbolos mentales y esto es necesarios para comprender conceptos, objetivos. Las actividades típicas del niño de estas edades son las imitaciones, el juego y el dibujo.
3. El niño en la edad escolar: debemos favorecer que los niños descansen las horas adecuadas para evitar la irritabilidad. No se les debe exigir más de lo que por sus condiciones físicas y psíquicas puedan realizar.
Los niños en estas edades aceptan los castigos, siempre que sean justos, porque tienen un claro sentido de lo que está bien o mal y se sienten muy gratificados cuando se aprueba lo que han hecho bien.
Se despierta un nivel de curiosidad muy alto por todo lo que les rodea. Hay que responder a sus cuestiones y darles una información correcta y sencilla que les deje satisfecho.

Los niños deben sentir la protección de la familia para contrarrestar los sentimientos de inseguridad que surgen en esta etapa.
4. La preadolescencia: se considera la etapa que comprende edades entre 9 y 11 años. El niño de esta edad, que se siente seguro, comprendido y aceptado, es capaz de hacer muchas tareas y tiene muchos momentos de satisfacción que le ayudan a superar las situaciones difíciles desarrollando una agradable relación con los adultos y compañeros.

El niño es muy sensible a las críticas y a las discusiones que puedan existir en la familia, especialmente entre los padres. Debemos favorecer en ellos la confianza en sí mismos ayudándoles a potenciar sus habilidades y favoreciendo su relación en pequeños grupos. Ya que el diálogo es fundamental en estas edades.

Se deben aclarar las dudas, angustias y miedos que rodean a la sexualidad, por desconocimiento, para que se vaya introduciendo en cada momento los conocimientos que favorezcan las buenas actitudes en relación con la salud física y mental.

5. La adolescencia: abarca entre los 12 y los 14 años, aunque, actualmente se mantiene la idea de una adolescencia que se prolonga hasta los 20 años. El adolescente va a mostrar unas necesidades básicas que son: - Necesidades fisiológicas: alimentación adecuada, sueño, descanso, ejercicio.
       - Necesidades de seguridad: estabilidad, libertad, ausencia de miedo, protección, orden.
         - Necesidades de pertenecer a un grupo y sentirse amado.
         - Necesidades de prestigio y estima.
         -Necesidades de saber y comprender. Curiosidad, descubrimiento de nuevos horizontes.
En esta etapa el adolescente es muy crítico, se entusiasma con las cosas que le gustan y de lo que no le gusta hace juicios muy duros. Muestra actitudes de rebeldía. Respecto a la escuela tiene una fase problemática. Su actitud respetuosa de los años anteriores puede ser reemplazada por comentario duros sobre el profesor, las materia, etc.






       

Desarrollo moral

La adquisición del desarrollo moral en el niño, ha sido un tema ampliamente discutido por psicólogos, filósofos y sociólogos.
Desde el punto de vista psicológico existen fundamentalmente dos concepciones distintas: una de ellas considera el desarrollo moral como un proceso de interiorización de normas y prohibiciones socialmente sancionadas. Esta posición mantiene que el niño va aprendiendo y asumiendo conductas en función de que estas sean castigadas o recompensadas. El niño aprenderá que ciertas cosas están mal porque serán castigadas de algún modo y aprenderá que otras están bien o son correctas porque cuando las haga será recompensado por ello.
La otra concepción afirma que el desarrollo moral es una elaboración de juicios universales sobre lo bueno y lo malo. Esta posición ha sido especialmente defendida por autores como Piaget o Kohlberg. Según esta concepción, el niño va a adquirir una serie de juicios, valores u opiniones a lo largo de su proceso evolutivo, que van a ser universales, es decir, el niño sabrá que una conducta es buena, no porque aprenda que dicha conducta es correcta en un entorno determinado, y por lo tanto buena, sino porque es objetiva y universalmente buena.
Tanto Piaget como Kohlberg sostienen que los niños no pueden emitir juicios morales sólidos hasta que alcanzan un nivel suficientemente alto de madurez cognoscitiva como para ver las cosas como las vería otra persona.
Piaget inicia su obra “El criterio moral en el niño”, definiendo la moralidad como un sistema de reglas, encontrándose la esencia de la moralidad en el respeto que los individuos adquieren por las reglas, el cual se obtiene a través de la relación entre sí mismo y los otros individuos. Para Piaget, la moral depende del tipo de relación social que el individuo sostiene con los demás, y existen tantos tipos de moral como de relaciones sociales.

ETAPAS DE DESARROLLO MORAL: heteronomía y autonomía moral (Piaget)

La moral heterónoma se basa en la obediencia, fundándose la relación entre las personas en el respeto unilateral hacia el que sustenta la autoridad. Es impuesta desde el exterior, como un sistema de reglas obligatorias. Tiene carácter coercitivo y es la fuente del deber. Esta etapa coincide con la etapa preoperacional, donde el niño tiene una idea estricta sobre los conceptos morales. El niño cree que las reglas no pueden ser cambiadas, la conducta es correcta o incorrecta, y cualquier ofensa merece un castigo severo. La obediencia es absoluta, y las cosas se siguen al pie de la letra, no hay excepción a la regla. El respeto es vivido unilateralmente, hacia un lado, el niño respeta al adulto.
El paso de la heteronomía a la autonomía implica el paso de lo egocéntrico a lo social, al sentido de la cooperación social, y por lo tanto la comprensión de la regla con un sentido de obligación. Esto se logra cuando la relación social está regulada por el reconocimiento del otro, donde el individuo se introduce en el mundo social.
Para Piaget un individuo es autónomo moralmente si es independiente de toda influencia externa, especialmente de la de las autoridades adultas. La conciencia autónoma se basa en relaciones de reciprocidad con otros, de igualdad.
En la autonomía se sigue una regla, un principio, o ley, que es interno a la propia conciencia de la persona, que la ha interiorizado a través de un proceso de construcción progresivo y autónomo. En la autonomía, la regla es el resultado de una decisión libre, racional y espontánea, surgiendo del propio individuo como un conjunto de principios de justicia. Se basa en el principio de igualdad, el respeto mutuo y las relaciones de cooperación.
Esta etapa se caracteriza por la flexibilidad moral; se contemplan las intenciones detrás de las acciones. Las reglas son transformadas de acuerdo a las necesidades, y la obediencia se da en el consenso. El respeto es mutuo, hay un sentimiento de cooperación con el otro.
No existe un patrón de moral absoluto o inmodificable, sino que cada individuo puede decidir lo que es correcto o incorrecto.

Fernanda Oviedo

domingo, 5 de septiembre de 2010

La Niñez




Se sitúa entre los 6 y 12 años. Corresponde al ingreso del niño a la escuela, acontecimiento que significa la convivencia con seres de su misma edad. Se denomina también "período de latencia", porque está caracterizado por una especie de reposo de los impulsos institucionales para concentrarnos en la conquista de la socialidad.
Las socialidad que comienza a desarrollar es "egocéntrica": "Todo sale de mí y vuelve a mí", "Te doy para que me des". Sus mejores amigos son los que le hacen jugar, le invitan al
cine o un helado".
El niño, al entrar en la escuela da pie al desarrollo de sus
funciones cognoscitivas, afectivas y sociales.

- F. Cognoscitivas:
El niño desarrolla la percepción, la memoria, razonamiento, etc.
- F. Afectivas: En cuanto que el niño sale del ambiente familiar donde es el centro del cariño de todos para ir a otro ambiente donde es un número en la masa; donde aprende y desarrolla el sentimiento del deber,
respeto al derecho ajeno amor propio, estima de sí, etc.
- F. Social: La escuela contribuye a extender las relaciones sociales que son más incidentes sobre la personalidad.

Características principales en esta etapa:

· Aprende a no exteriorizar todo, aflora, entonces, la interioridad.
· Son tremendamente imitativos, de aquí que necesiten el buen ejemplo de sus padres.
· El niño se vuelve más
objetivo y es capaz de ver la realidad tal como es.
· Suma, resta, multiplica y divide cosas, no números.
· Adquiere un
comportamiento más firme sobre sus realidades emocionales.

LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LA INFANCIA: EDUCACION, FAMILIA Y ESCUELA


1. LAS EMOCIONES EN LA INFANCIA (cómo se desarrollan)

Grandes filósofos, entre ellos Platón, ya hablaban de la Educación como medio cuyo fin era proporcionar al cuerpo y al alma toda la perfección y belleza de que una y otra son susceptibles. Así, desde este punto de vista, podríamos definir la Educación como la suma total de procesos por medio de los cuales un grupo social transmite sus capacidades y poderes reorganizando y reconstruyendo las emociones para adaptar al individuo a las tareas que desempeñará en el proceso psicológico a lo largo de su vida (desde la infancia hasta la senectud).
La Inteligencia Emocional, como toda conducta, es transmitida de padres a niños, sobre todo a partir de los modelos que el niño se crea. Tras diversos estudios se ha comprobado que los niños son capaces de captar los estados de ánimo de los adultos. El conocimiento afectivo está muy relacionado con la madurez general, autonomía y la competencia social del niño.

2. LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL CONTEXTO FAMILIAR

La personalidad se desarrolla a raíz del proceso de socialización, en la que el niño asimila las actitudes, valores y costumbres de la sociedad. Y serán los padres los encargados principalmente de contribuir en esta labor, a través de su amor y cuidados, de la figura de identificación que son para los niños (son agentes activos de socialización). Es decir, la vida familiar será la primera escuela de aprendizaje emocional.
Por otro lado, también van a influir en el mayor número de experiencias del niño, repercutiendo éstas en el desarrollo de su personalidad. De esta forma, al controlar la mayor parte de las experiencias de los niños, los padres contribuyen al desarrollo de la cognición social.
Los cinco componentes básicos de la Inteligencia Emocional son:

- Autoconocimiento emocional.
- Reconocimiento de emociones ajenas
- Autocontrol emocional.
- Automotivación
- Relaciones interpersonales.

Un estudió demostró los tres estilos de comportamiento más inadecuados por parte de los padres. Estos son:

- Ignorar completamente los sentimientos de su hijo, pensando que los problemas de sus hijos son triviales y absurdos
- El estilo laissez-faire. En este caso, los padres sí se dan cuenta de los sentimientos de sus hijos, pero no le dan soluciones emocionales alternativas, y piensan que cualquier forma de manejar esas emociones “inadecuadas”, es correcta (por ejemplo, pegándoles).
- Menospreciar o no respetar los sentimientos del niño (por ejemplo, prohibiéndole al niño que se enoje, ser severos si se irritan...).

3. LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LA ESCUELA (consejos)

Si nos detenemos en el tipo de educación implantada hace unos años, podremos observar cómo los profesores preferían a los niños conformistas, que conseguían buenas notas y exigían poco ( de esta forma se estaba valorando más a los aprendices receptivos y los discípulos más que a los aprendices activos).
De este modo, no era raro encontrarse con la profecía autocumplida en casos en los que el profesor espera que el alumno saque buenas notas y éste las consigue, quizá no tanto por el mérito del alumno en sí sino como por el trato que el profesor le da.
También se encontraban casos de desesperanza aprendida, producida por el modo en que los profesores respondían a los fracasos de sus alumnos.
Pero hemos evolucionado, y para seguir haciéndolo tendremos que asumir que la escuela es uno de los medios más importantes a través del cual el niño “aprenderá” y se verá influenciado (influenciando en todos los factores que conforman su personalidad).
Por tanto, en la escuela se debe plantear enseñar a los alumnos a ser emocionalmente más inteligentes, dotándoles de estrategias y habilidades emocionales básicas que les protejan de los factores de riesgo o, al menos, que palien sus efectos negativos.
Goleman, 1995, ha llamado a esta educación de las emociones alfabetización emocional (también, escolarización emocional), y según él, lo que se pretende con ésta es enseñar a los alumnos a modular su emocionalidad desarrollando su Inteligencia Emocional.
Los objetivos que se persiguen con la implantación de la Inteligencia Emocional en la escuela, serían los siguientes:
. Detectar casos de pobre desempeño en el área emocional.
. Conocer cuáles son las emociones y reconocerlas en los demás
. Clasificarlas: sentimientos, estados de ánimo...
. Modular y gestionar la emocionalidad.
. Desarrollar la tolerancia a las frustraciones diarias.
. Prevenir el consumo de drogas y otras conductas de riesgo.
. Desarrollar la resiliencia
. Adoptar una actitud positiva ante la vida.
. Prevenir conflictos interpersonales
. Mejorar la calidad de vida escolar.

Para conseguir esto se hace necesaria la figura de un nuevo tutor (con un perfil distinto al que estamos acostumbrados a ver normalmente) que aborde el proceso de manera eficaz para sí y para sus alumnos. Para ello es necesario que él mismo se convierta en modelo de equilibrio de afrontamiento emocional, de habilidades empáticas y de resolución serena, reflexiva y justa de los conflictos interpersonales, como fuente de aprendizaje vicario para sus alumnos.
Este nuevo tutor debe saber transmitir modelos de afrontamiento emocional adecuados a las diferentes interacciones que los alumnos tienen entre sí (siendo fruto de modelos de imitación, por aprendizaje vicario, para los niños). Por tanto, no buscamos sólo a un profesor que tenga unos conocimientos óptimos de la materia a impartir, sino que además sea capaz de transmitir una serie de valores a sus alumnos, desarrollando una nueva competencia profesional. Estas son algunas de las funciones que tendrá que desarrollar el nuevo tutor:
- Percepción de necesidades, motivaciones, intereses y objetivos de los alumnos.
- La ayuda a los alumnos a establecerse objetivos personales.
- La facilitación de los procesos de toma de decisiones y responsabilidad personal.
- La orientación personal al alumno.
- El establecimiento de un clima emocional positivo, ofreciendo apoyo personal y social para aumentar la autoconfianza de los alumnos.

La escolarización de las emociones se llevara a cabo analizando las situaciones conflictivas y problemas cotidianos que acontecen en el contexto escolar que generan tensión (como marco de referencia para el profesor, y en base a las cuales poder trabajar las distintas competencias de la inteligencia emocional.
Por último, vamos a puntualizar que para que se produzca un elevado rendimiento escolar, el niño debe contar con 7 factores importantes:

- Confianza en sí mismo y en sus capacidades
- Curiosidad por descubrir
- Intencionalidad, ligado a la sensación de sentirse capaz y eficaz.
- Autocontrol
- Relación con el grupo de iguales
- Capacidad de comunicar
- Cooperar con los demás


Y para que el niño se valga de estas capacidades una vez se escolarice, no hay que poner en duda que dependerá mucho del cuidado que haya recibido por sus padres.
De este modo, debemos resaltar que para una educación emocionalmente inteligente, lo primero será que los padres de los futuros alumnos proporcionen ese ejemplo de Inteligencia Emocional a sus niños, para que una vez que éstos comiencen su educación reglada, ya estén provistos de un amplio repertorio de esas capacidades emocionalmente inteligentes.


jueves, 26 de agosto de 2010

DESARROLLO SOCIAL

Por: Silvina Díaz

El estudio del desarrollo social es relativamente reciente y esto ha provocado posturas encontradas en el campo evolutivo, y aunque todos los autores manifiestan su acuerdo en que el niño es un ser social por naturaleza, existe desacuerdo sobre el momento de inicio de la socialización.

Para unos autores desde el momento del nacimiento existe socialización, ya que el niño necesita de los demás para alimentarse y se comunica con ellos mediante el llanto.
Para otros, en cambio, el proceso de socialización es progresivo y no se adquiere hasta edades más avanzadas cuando se tiene conciencia de uno mismo y de los demás.
Para la mayoría de los autores el desarrollo social comienza desde el momento en que el niño nace, ya que el primer contacto social o la primera interacción social que se produce en su vida, es el contacto con su madre.
Los padres serán así el primer agente socializador en la vida del niño. La familia va a ser de gran importancia ya que en la interacción padres-hijos se desarrollan patrones de protección de actitudes y valores personales, con los que el niño generará más adelante las habilidades sociales necesarias que le permitan relacionarse de forma satisfactoria con sus iguales.
Los siguientes socializadores en la vida de un niño serán sus compañeros, amigos o iguales junto con instituciones sociales como la escuela.
Por tanto, la socialización es el resultado de la interacción entre el niño y el grupo social donde vive y adquiere roles, normas y costumbres.


- DE 0 A 3 MESES:

Hacia las tres semanas de vida, el bebé imita los gestos de los adultos que le cuidan y es capaz de percibir y reaccionar ante las expresiones emocionales de los demás.
A través de la interacción con su madre el niño establece lo que llamamos vínculo, que es el lazo afectivo que se establece por la proximidad y el cariño del otro.

- ENTRE LOS 3 Y 6 MESES:

El bebé reconoce a las personas de su entorno y reacciona ante su presencia.
Determinadas personas adquieren para el niño un significado muy importante y es capaz de percibir la sonrisa, el llanto y reaccionar ante ellos.
Experimenta angustia de separación, si su madre se ausenta.

- DE 6 A 12 MESES:

El bebé interpreta y comprende las demandas de los que le rodean e intenta hacerles partícipes de su actividad.
Tiene reacciones en su conducta como vocalizaciones, llanto, abrazos, aceptación o rechazo. Discriminan y adoptan una posición de miedo y cautela ante los extraños.
Al llegar al primer año, el niño es capaz de reconocer se a sí mismo y su carácter comienza a asociarse a claves sociales externas: si el niño está bien va a sonreir y manifestar curiosidad hacia el mundo que le rodea. De esta misma forma va a manifestar abiertamente conductas sociales negativas como la defensa, mediante el llanto, ante personas extrañas.

- ENTRE 18 Y 24 MESES:

Manifiesta simpatía o antipatía hacia personas concretas. Comienza a interesarse ya por sus propios objetos. Ya es un niño que colabora al vestirse y que comienza a tener hábitos en la mesa y respeta turno de comunicación.
Sin embargo, aún no conocen adecuadamente la norma social o no la comprenden pudiéndo dar lugar a rabietas.
Durante el segundo año de vida, el niño descubre y desarrolla un nuevo comportamiento: bromea, asusta y sorprende a sus padres. La sensación de bienestar familiar aumenta y también el miedo a los extraños.

- ENTRE 2 Y 3 AÑOS:

En este año comienza a encontrarse con los otros niños y a estar con ellos, pero prefieren jugar solos.
En el tercer año reafirman su sentido del yo y su independencia. Saben controlar sus esfínteres, controlan sus enfados y sus llantos y expresan sentimientos como amor, celos, envidia o tristeza.
Las relaciones sociales con los otros niños cambian, ya que, aunque siguen prefiriendo jugar solos, están más abiertos a comunicarse y a compartir sus juguetes.

- ENTRE 4 Y 5 AÑOS:

El niño se preocupa por los demás, comparte sus cosas y demuestra su cariño. Sus contactos sociales en este periodo no son muy grandes, pero aprende a acomodarse al grupo, coopera y participa en el mismo, aunque no aceptan claramente las normas del grupo.

- A PARTIR DE LOS 6 y 7 AÑOS:

Coincidiendo con la Educación Primaria, se empiezan a establecer las verdaderas interacciones sociales, a través de las que el niño aprenderá a conocerse a sí mismo y a respetar las normas de grupo y está será la preparación fundamental para relacionarse con los demás y aprender las habilidades sociales que regirán la vida adulta.

- A PARTIR DE LOS 8 AÑOS Y HASTA LOS 13:

Los niños establecen identificaciones con adultos y profesores. La compasión y el interés por los otros se hace patente en la capacidad de los niños por amar y compartir. Aumenta el deseo de comunicarse con los demás y las relaciones que se establezcan serán muy importantes, ya que en esta etapa se establecen relaciones duraderas y estables con los compañeros.

- DURANTE LA ADOLESCENCIA:

La experiencia que se ha adquirido en la escuela, intensifica la separación de la familia y a la vez incrementa las relaciones interpersonales.
En este periodo las interacciones más fuertes se producen con personas de la misma edad y con los que se comparten los mismos intereses. Los adolescentes adquieren su identidad a través de la socialización con sus iguales y mantienen con ellos un mismo código en su apariencia física, ropa o conducta.
Es necesario tener en cuenta la interrelación que existe entre la socialización y otros procesos evolutivos como el desarrollo afectivo y la competencia cognitiva.

Como hemos visto el niño depende de su grupo social y de sus pautas o costumbres inculcadas desde el nacimiento para ir adquiriendo unas correctas habilidades sociales que le permitan tener resultados satisfactorios. Por eso insistimos es fundamental el papel de la familia y de la escuela como socializadores, ya que el aprendizaje de las habilidades sociales se adquiere mediante información, pero también a través de la observación e imitación de los que se ve y oye.

DESARROLLO DEL NIÑO EN LOS PRIMEROS 12 AÑOS DE VIDA

Por: Silvina Díaz

1. LOS PRIMEROS AÑOS DE VIDA: DE 0 A 2 AÑOS

Momento familiar: toda la unidad familiar debe efectuar cambios para adaptarse al nuevo miembro; aparecen funciones específicas para la crianza del niño; se empieza a reflexionar sobre lo que significa ser padre/madre. Una de las funciones primordiales de la familia con respecto al niño es la protectora.

Algunas características del desarrollo del niño:
• Juegos con el propio cuerpo a través del movimiento, donde va descubriendo sensaciones nuevas y placenteras (hasta los 6 meses).
• Juegos con objetos (ej: sonajeros, pequeños juguetes, a veces incluso el mismo cuerpo).
• Inicio de la marcha: continúan explorando y descubriendo cosas; es ahí donde empiezan el contacto
con las normas, con el NO (“No toques”).
• Aprendizaje del control de los esfínteres: también aquí se encuentran con prohibiciones venidas de unas exigencias sociales impuestas.
• Socialización: durante el primer y segundo año de vida, el desarrollo social depende básicamente de la interacción con las personas a las que se vincula afectivamente, las que se llaman figuras de apego (fundamentalmente, padres y hermanos), que son las que controlan su conducta, organizan la estimulación que le llega y satisfacen sus necesidades básicas.

2. LA PRIMERA INFANCIA: DE 2 A 6 AÑOS

Momento de la familia: primer momento de autonomía del niño, motivado, sobre todo, por su toma de contacto con el mundo exterior.

Algunas características del niño:
• Conflicto niño-adulto: los padres intervienen en la conducta del niño casi continuamente, como
consecuencia se producen en el niño conductas de oposición, rabietas.
• Etapa de fantasía, de egocentrismo: el niño es incapaz de asumir el punto de vista del otro y sus necesidades son prioritarias.
• Comienzo del desarrollo del lenguaje.
• Juego: imitan el mundo adulto en sus juegos, siendo los padres en todo momento modelos para los hijos.
• Autoestima: influye positivamente en ella la asunción de pequeñas responsabilidades (ej: recoger sus propios juguetes).
• Pueden darse sentimientos de celos ante la llegada de otros hermanos.
• Socialización: comienzan la etapa escolar, donde encontrarán más figuras de referencia (los
profesores) y, sobre todo, donde comenzarán a relacionarse con iguales (amigos).

Criterios educativos básicos:
• Potenciar en los niños el autocontrol, ayudándoles a interiorizar las normas adultas y a adquirir mayor control sobre su conducta; hacer un presión adecuada a sus capacidades (ordenar sus juguetes, comer solos, vestirse, ...).
• Ante la llegada de otros hermanos, evitar rupturas bruscas con el estado anterior y hacerle partícipe de la ilusión de dicha llegada.
• En el comienzo de su etapa escolar, iniciar a los niños en actividades que impliquen colaboración, reforzar las conductas que tienen en cuenta a otros niños, mostrarse tolerante y comprensivo con los conflictos que puedan darse.
• Afecto, presión adecuada a sus necesidades, control y comunicación serán, entonces, los criterios educativos básicos.

3. LA SEGUNDA INFANCIA: 6 A 10 AÑOS

Momento del ciclo vital: mayor autonomización del niño, aumenta la relación con iguales; la familia tiene que facilitar este proceso.

Algunas características del desarrollo:
• Superación del egocentrismo-individualismo: empiezan a situarse también en el punto de vista del otro.
• Avances en el desarrollo psicomotor y en el lenguaje.
• Avances significativos en el desarrollo social e intelectual.
• Poca capacidad crítica, son permeables y receptores a todo. Utilizan los argumentos de los adultos.
• Aumento del grado de autocontrol, asume normas sociales.
• Socialización: aumento de las relaciones con iguales, aunque la familia es todavía central. La
identidad, la autoestima y el rol sexual se conforman, sobre todo, en el grupo de iguales. Sentimiento de grupo.

Criterios educativos:
• Facilitar las ocasiones en que los niños puedan interactuar libremente con sus iguales, fomentando la participación en actividades grupales organizadas por diferentes instituciones.
• En lo referente al desarrollo moral, fomentar actividades cooperativas, el análisis y discusión de los conflictos que se planteen, juegos que exijan cambiar de rol a los sujetos, asunción de pequeñas responsabilidades.
• Los adultos son importantes modelos de observación para el niño.

4. LA PREADOLESCENCIA: 10 A 12 AÑOS

Momento del ciclo vital: asumir, con la llegada de los hijos a esta etapa, la importancia que cobra y el papel que juega el grupo de pares; resolver las reacomodaciones que el preadolescente va demandando de forma conveniente para él y para toda la familia.

Algunas características del desarrollo:
• Notable desarrollo de la capacidad de razonar. Antes se razonaba sin datos concretos. Aumenta la capacidad de conocer y tener datos, necesidad de dominar la realidad.
• Va desarrollando la capacidad de reflexión sobre sus actos y sus sentimientos.
• Socialización: es la edad de los amigos y las pandillas; se forman grupos homogéneos, no se mezclan chicos y chicas. Aparece la figura del líder de la cuadrilla. Van menos con los adultos. En el grupo se autoafirman y van satisfaciendo, en la medida de sus posibilidades, el deseo de ser mayores.

Criterios educativos:
• Ser sensibles a los cambios que se avecinan.
• La familia ha de actuar como contraste de lo que recibe y vive en el grupo de iguales.
• Entender la distancia afectiva que marcan; ya no se consideran niños; aunque esto no significa que no necesiten dicho afecto. Desarrollar otras pautas afectivas.
• Fomentar la autoestima, valorando sus capacidades y virtudes.
• Posibilitar nuevos cauces de comunicación, desarrollando la capacidad de la escucha activa y la empatía como elementos fundamentales.

viernes, 20 de agosto de 2010

Desarrollo Psicosexual - Sigmund Freud

Por: Victoria Alarcón

Sigmund Freud, austríaco, doctor y fundador del psicoanálisis. Desarrolla por primera vez en la historia el concepto de sexualidad infantil, manifiesta que el niño posee desde muy temprano instintos y actividades sexuales.
A medida que un individuo se va desarrollando, pasa por diferentes etapas, cambios en su cuerpo y en sus relaciones con los demás.
Estas etapas son denominadas de evolución de la libido; que es la energía que corresponde a la sexualidad.
Según Freud, el individuo busca distintas formas de satisfacción sexual, y sus fantasías. Él describió las etapas y las zonas donde se centra el placer en cada momento del desarrollo; y nos permiten comprender las características de la personalidad y el comportamiento.
En psicoanálisis se distinguen diferentes etapas del desarrollo de la libido:
1) Etapa oral ------------- 0 a 1 año de edad
2) Etapa anal ------------ hasta 2-3 años
3) Etapa fálica ----------- hasta 5-6 años
4) Etapa de latencia --- etapa escolar hasta la pubertad.
5) Etapa genital --------- a partir de la pubertad y transcurriendo lentamente durante todo la adolescencia.

1) Etapa oral

Desde el nacimiento hasta el destete. El niño poco a poco se va identificando con su madre; y si ella le sonríe él también, si ella habla él balbucea, etc.
Durante la dentición el dolor se calma al morder. El mordisco es su manifestación agresiva, pero es sano para el bebé que lo haga, por lo tanto se recomienda a las madres retirarles el pecho antes de éste período, para que muerda y chupe otros objetos, sin provocar la prohibición.
El bebé se encuentra en un estado de desamparo total y esto hace que dependa de su madre; a través del llanto el recién nacido pedirá para obtener la satisfacción de sus necesidades. Ejemplo, cuando llora le responden con una mema, o se lo toma en brazos; así el bebé construye un vinculo con su madre, que lo satisface y que será de suma importancia en su desarrollo.
El juego en esta etapa es una actividad que proporciona placer autoerótico, porque se produce en el propio cuerpo. Por lo general está relacionado con la alimentación. Poco a poco al separarse de su madre el niño comienza a transferirle las propiedades de su cuerpo a "objetos transicionales"(objetos de apego), ya que permiten crear un espacio intermedio entre el bebé y la mamá. Estos objetos son acariciados y maltratados (libido y agrasión) para expresar su ambivalencia afectiva.

2) Etapa anal

En esta etapa el niño descubre junto con el control del esfínter el poder que esto le trae, dar o no dar, según quiera. Se adueña de su cuerpo, él decide si quiere o no ir al baño. Su independencia comienza a tomar forma.
La expulsión de los excrementos produce emociones contradictorias en el niño, por un lado intenta recompensar a la madre con ellos y por el otro cuando se constipa expresa el desacuerdo o la negación de los deseos de la madre.
El niño siente placer cuando es higienizado por su madre, esto es una de las dificultades que el niño sufre al pasar por esta etapa, al no tener esa satisfacción el niño se niega a controlar el esfínter y esto dificulta aún más su desarrollo.
Por otro lado el niño al descubrir este manejo de su cuerpo, se siente grande, mayor e importante como algún amigo o hermano mayor que ya lo hace; y si es alagado, felicitado y hasta recompensado por ello la satisfacción de haber superado esta etapa es aún mayor que la satisfacción al ser higienizado por su madre.
El control del esfínter requiere dos renuncias: por un lado renunciar a jugar con sus propios excrementos y por otro debe renunciar a hacer sus necesidades en cualquier sitio y horario.
El niño trata de imitar al adulto en sus gestos y en sus palabras.
En esta edad el niño comienza a jugar con agua, con arena, y con barro; a desplazarse sólo y a adueñarse de los movimientos de su cuerpo, sabiendo que quiere o no hacer. En esta etapa la ambivalencia es la base de la conducta, en la que aparece la tendencia al amor y al odio hacia el objeto de amor. El pensamiento funciona como un esquema de opuestos.
Toda mujer es una mamá, buena o mala, grande o pequeña, allí empiezan las comparaciones. Los objetos que se oponen a su voluntad son malos y el les pega.
las reacciones agresivas deben ser desplazadas a los muñecos, los animales o a otros objetos que remplacen a los padres. En este momento el niño toma esta realidad afectiva como objetiva, tan solo registra las repercusiones agradables o desagradables que tiene su propia existencia.

3) Etapa fálica

Esta etapa va desde los 4 a los 6 años; en la que la niña y el niño descubren sus órganos sexuales, a causa de la excitación de la micción y por los locamientos repetidos que tienen lugar durante el aseo.
Los bebés tienen juegos eróticos manuales y generalmente esta actividad que ellos realizan cesa por si misma y vuelve a aparecer a los 3 años.
Descubren la diferencia de sexos.
Los padres le imponen una renuncia al interés que tienen por tocarse, en nombre de la estética y la moral; y el niño se adapta a dicha imposición a fin de retener el amor paternal. Cuando lo logra, se vuelve a centrar en su interés por los genitales.
Los niños de esta edad empiezan los "porque". Cuando los adultos le responden sus preguntas sexuales, el niño percibe lo prohibido. El papel de las relaciones sexuales entre los padres todavía resulta oscuro.
Entre los 4 y 5 años aparecen otros tipos de preguntas como el de:¿cuál es la diferencia entre niño y niña?. Los padres intentan explicar que la niña no tiene pene. El niño trata de negarlo pensando que tiene uno más pequeño o que le va a crecer. Sin embargo, piensa que la madre también tiene pene, pues al niño le resulta imposible creer que la madre carezca de el.
A medida que el niño crece, la madre ya va dejando de ocuparse de él en forma exclusiva.
El niño necesita menos compañía, juega más con sus juguetes y su voz.
La observación de la actividad de la madre y la reflexión sobre sus palabras lo conducen a adquirir dos nociones importantes; aparece el obedecer, o el portarse bien con la promesa de que si se porta bien recibirá tal cosa. Los niños no temen perder el amor de sus padres, porque lo tuvieron o porque no lo tuvieron incondicionalmente, tienen problemas de conducta.
El niño descubre la muerte en esta etapa, al observar a los animales, pregunta acerca de las causas de su muerte que el atribuye a la vejez. "Matar es inmovilizar", ese es el sentido que cobra al principio la muerte para el niño.
El niño o la niña descubre que ya no son el único amor de la madre, que pueden ser abandonados por otros intereses de ella: su padre y sus hermanos se transforman en sus rivales.
En el estadio anal, la niña se interesa por cambiar y bañar a las muñecas y por lavar trapos. El niño juega con más piedras, con autos, con trenes.
Ella se empieza a preocupar por su arreglo personal, le saca los cosméticos a la mamá, se pone su ropa, sus zapatos, se identifica con ella, la imita en gestos, en palabras, etc.
El niño se entrega a juegos más agresivos, juega con bastones, con palos, los transforma en fusiles, en revólveres, y se complace con dar miedo y ordenar. Cuando puede, se pone la ropa del padre.
Hacia los 4 años y medio, el varón juega con golpear y matar a su padre en la lucha emocional con él y trata de acaparar toda la ternura de su madre, le promete casarse con ella y tener hijos: entra en el período del complejo de Edipo.
La niña vive un período similar, hacia los 3 años y medio, se comporta de manera seductora con su padre, se muestra coqueta y afectuosa, centra su interés en él. Se muestra celosa de él y trata de acaparar su atención y su afecto.
Pero para el niño y la niña la pareja de los padres en esta etapa resulta una frustración, y muchas veces los progenitores los mandan a jugar para poder quedar a solas en su intimidad y el niño se siente impotente y celoso.
Si el niño asiste a las relaciones sexuales entre los padres, sea porque los sorprende; las imagina como una especie de batalla violenta. A esto se le denomina "escena primaria"(coito entre los padres).
Las nuevas teorías psicológicas sobre la sexualidad femenina ponen el énfasis en la revalorización del rol femenino: la mujer no se dirigía al padre, porque la madre no tiene pene, sino para comprobar si él esta tan orgulloso de ella, porque es tan femenina como la madre.

Complejo de Edipo en el varón

Hasta aquí los niños creen que tanto la madre como el padre tienen pene.
La angustia de castración, o sea el temor a la pérdida del pene, parte de una falsa interpretación de la realidad, pero el niño no puede escapar a esta angustia ya que el peligro que siente está motivado en su fantasía. El niño es consciente del malestar, pero lo niega y lo interpreta como provocado por el exterior, y su razón lo obliga a encontrar una causa.
La angustia de castración es consciente, y es lo que determina que el niño se aleje de la relación con su madre. Por eso Freud en sus trabajos dice que la diferencia entre el niño y la niña es que el niño sale del complejo de Edipo por la angustia de castración, en cambio la niña entra en el complejo de Edipo por la misma angustia.
Hacia los 3 o 4 años, el niño se comporta en relación con la madre como un adulto, quiere ocupar el lugar del padre. Para el niño, hasta esta etapa, el más importante amor ha sido la madre y sigue siéndolo.
El niño siente deseos agresivos y de muerte hacia el padre, y deseos de apropiación hacia la madre. El niño enfrenta al padre, lo subestima, lo cela, porque él es su rival frente a su objeto de amor. El niño declina la agresividad hacia el padre para, en efecto, poder identificarse con él.
Ya que la competencia con el padre despierta la angustia de castración, sino se resuelve de esta forma, puede tener severos trastornos en la sexualidad y la personalidad.
La finalización del complejo de Edipo abre al niño comportamientos escolares y lúdicos, y su vida afectiva comienza a dirigirse hacia otras personas fuera de su familia.

Complejo de Edipo en la niña

En la etapa fálica a los 3 años y medio, la niña descubre que hay unas criaturas poseedoras de un pene que "ella no tiene".
Comienza por negar esto que le pasa, se pone celosa pero sabe que en algún m omento le crecerá.
Freud describe como esta envidia del pene, acompaña la fantasía masturbatoria de la niña. Este es un período donde la niña tiende a exhibirse, se quiere mostrar desnuda, se levanta la pollera, etc. Esta es la reacción normal de la niña frente a la angustia de castración.
La niña descubre entonces que debe renunciar para siempre con la idea de tener un pene, ya que su madre no lo había tenido nunca.
El interés de la niña se desplaza hacia el cuerpo o el rostro y empieza a adornarse, a peinarse, a ponerse collares y flores en el pelo; esto parece ser una compensación por aquello a lo que ha tenido que renunciar.
Comienza a tratar de conquistar al padre. Se dirige hacia él, a quién considera superior y atractivo a su madre. La niña se vuelca cada día más hacia su padre, declarando abiertamente su deseo de tenerlo como marido, es donde empieza a tener fantasías agresivas en donde mata a la madre y se queda con él.
Si el padre no la alienta y no la estimula en esta fantasía, le impone una ley donde ella progresivamente debe renunciar a sus deseos.
En la adolescencia es cuando pueden anunciarse restos de complejo edípico; el padre, sino esta celoso, estimula a la adolescente para que se relacione con otros chicos, con lo cual podrá pasar de su padre como objeto de amor, aun sustituto del mundo exterior.

4) Etapa de latencia

Es una etapa que se emplea en la adquisición de los conocimientos necesarios para la vida. Se olvidan las vivencias sexuales infantiles y este olvido posibilita la escolarización.
A esta edad pueden aparecer trastornos escolares o dificultades para expandirse socialmente, porque el niño no tiene confianza en sí mismo. La causa puede ser de una deficiencia intelectual real; pero generalmente las dificultades obedecen a conflictos emocionales que padecen los niños debido a distintas situaciones, tales como divorcio, duelos, enfermedades y/o peleas que perturban la atmósfera familiar.
La libido que antes estaba depositada en el progenitor del sexo opuesto, ahora esta puesta al servicio de actividades escolares de aprendizaje.
De este modo el niño queda libre para establecer vínculos con grupos de pares, maestros y otras personas.

5) Etapa genital

Durante ésta etapa se produce una transformación, por lo cual la consideramos como un tipo de cambio, aparece el despertar sexual, pero no el primero. Se le llama "secundario", porque ya durante la primera infancia el niño ha atravesado por un primer despertar sexual.
Adolescencia se refiere a hacerse grande, estar en crecimiento, lo cual ha llevado a considerar la adolescencia como la etapa previa a la adultez. Freud no habla de "adolescencia" sino de "pubertad". Y nombra la metamorfosis que se produce con el despertar sexual: la resignificación de la dramática edípica.
En este momento se alcanzan la amplitud para el coito y la capacidad reproductora. Pero la inmadurez psicológica del adolescente hace que este fin no sea logrado fácilmente.
La pubertad se presenta entonces como un salto, una interrupción que discontinua los tiempos de la infancia.
Los cambios más importantes son: la liberación de la autoridad de los padres; el sepultamiento del complejo edípico, el encuentro de un objeto de amor en el mudo exterior al familiar y que se accede a la conformidad sexual definitiva.

martes, 17 de agosto de 2010

Publicado por Macarena Núñez y Patricia García


 Desarrollo del vocabulario
Cuando los bebes empiezan a hablar, los padres o los cuidadores suelen ayudarles  al repetir sus primeras palabras pronunciándolas de manera correcta.
El vocabulario se incrementa con rapidez cuando un adulto aprovecha  las oportunidades  apropiadas  para enseñarle  al niño una palabra nueva. Si la madre de Jordan dice “esta es una pelota” , cuando Jordan  está viendo la pelota, existen más posibilidades  de que recuerde la palabra que si estaba jugando con algo mas  y ella trato de desviar su atención hacia la pelota.(Dunham, Dunham y Curwin, 1993). Los adultos ayudan a un niño pequeño que empieza a unir palabras al extender lo que el niño dice. Si Christina dice “mami calcetín” la madre puede responder “si ese es el calcetín de mami”.
Los bebes aprenden  al escuchar lo que los adultos dicen. Se ha encontrado una fuerte evidencia entre la frecuencia de diversas palabras en el habla de la madre y el orden en el que los niños aprenden esas palabras (Huttenlocher, Haight, Bryk, Seltzer, y Lyons, 1991), asi como entre la verbosidad de la madre y la cantidad de vocabulario de los niños en la etapa de los primeros pasos.(Huttenlocher,1998).
No obstante, la sensibilidad y la responsividad  al nivel de desarrollo del niño son más importantes que el número de palabras que utiliza la madre. En un estudio longitudinal, en el cual se observo a los niños pequeños cuando interactuaban con su progenitora, a los 13 y 20 meses de edad, las madres incrementaron su uso del vocabulario para ajustarse a las crecientes habilidades de lenguaje de sus hijos ; y los niños con un léxico más amplio, tenían madres que eran más responsivas(Bornstein, Tamis-LeMonda y Haynes,1999).
En los hogares donde se hablan dos idiomas, al principio los bebes suelen utilizar elementos de ambos; en ocasiones en la misma frase, fenómeno que se conoce como mezcla de códigos. Sin embargo, los bebes pequeños aprenden a discriminar entre idiomas. Una observación naturalista en Montreal (Genesee, Nicoladis y Paradis, 1995) sugiere que, incluso, niños de dos años –de hogares bilingües- diferencian entre los idiomas; por ejemplo, en el caso de emplear al francés, con un padre de habla predominantemente francesa , y el ingles, con una madre de habla principalmente ingles. Esta habilidad de cambiar de un idioma a otro se llama cambio de código.
Material extraído de Piscología del Desarrollo, Diane E .Papalia

lunes, 16 de agosto de 2010

Desarrollo de lenguaje y evolución

PUBLICADO POR MARIANA CARRERAS
Piaget destaca la prominencia racional del lenguajey  lo asume como uno de los diversos aspectos que integran la superestructura de la mente humana. El lenguaje es visto como un instrumento de la capacidad cognoscitiva y afectiva del individuo, lo que indica que el conocimiento lingüístico que el niño posee depende de su conocimiento del mundo.

Su estudio y sus teorías se basan en las funciones que tendría el lenguaje en el niño. Para Piaget las frases dichas por los niños se clasifican en dos grandes grupo: las del lenguaje egocéntrico y las del lenguaje socializado; estas a su vez se dividen en las siguientes categorías:

LENGUAJE EGOCÉNTRICO: "Se caracteriza porque el niño no se ocupa de saber a quién habla ni si es escuchado. Es egocéntrico, porque el niño habla más que de sí mismo, pero sobre todo porque no trata de ponerse en el punta de vista de su interlocutor. El niño sólo le pide un interés aparente, aunque se haga evidente la ilusión de que es oído y comprendido.

1-Repetición o Ecolalia: el niño repite sílabas o palabras que ha escuchado aunque no tengan gran sentido para él, las repite por el placer de hablar, sin preocuparse por dirigirlas a alguien. Desde el punto de vista social, la imitación parece ser una confusión entre el yo y el no-yo, de tal manera que el niño se identifica con el objeto imitado, sin saber que está imitando; se repite creyendo que se expresa una idea propia.


2-El monólogo: el niño habla para sí, como si pensase en voz alta. No se dirige a nadie, por lo que estas palabras carecen de función social y sólo sirven para acompañar o reemplazar la acción. La palabra para el niño está mucho más ligada a la acción que en el adulto. De aquí se desprenden dos consecuencias importantes: primero, el niño está obligado a hablar mientras actúa, incluso cuando está sólo, para acompañar su acción; segundo, el niño puede utilizar la palabra para producir lo que la acción no puede realizar por sí misma, creando una realidad con la palabra (fabulación) o actuando por la palabra, sin contacto con las personas ni con las cosas (lenguaje mágico).

3-Monólogo en pareja o colectivo: cada niño asocia al otro su acción o a su pensamiento momentáneo, pero sin preocuparse por ser oído o comprendido realmente. El punto de vista del interlocutor es irrelevante; el interlocutor sólo funciona como incitante, ya que se suma al placer de hablar por hablar el de monologar ante otros. Se supone que en el monólogo colectivo todo el mundo escucha, pero las frases dichas son sólo expresiones en voz alta del pensamiento de los integrantes del grupo, sin ambiciones de intentar comunicar nada a nadie.

LENGUAJE SOCIALIZADO:
1-La Información Adaptada: el niño busca comunicar realmente su pensamiento, informándole al interlocutor algo que le pueda interesar y que influya en su conducta, lo que puede llevar al intercambio, la discusión o la colaboración. La información está dirigida a un interlocutor en particular, el cual no puede ser intercambiable con el primero que llega, si el interlocutor no comprende, el niño insiste hasta que logra ser entendido.




2-La crítica y la Burla: son las observaciones sobre el trabajo o la conducta de los demás, específicas con respecto a un interlocutor, que tienen como fin afirmar la superioridad del yo y denigrar al otro; su función más que comunicar el pensamiento es satisfacer necesidades no intelectuales, como la combatividad o el amorpropio. Contienen por lo general, juicios de valor muy subjetivos.

3-Las órdenes, ruegos y amenazas: el lenguaje del niño tiene, principalmente, un fin lúdico. Por lo tanto, el intercambio intelectual representado en la información adaptada es mínimo y el resto del lenguaje socializado se ocupa, principalmente, en esta categoría. Si bien las órdenes y amenazas son fáciles de reconocer, es relevante hacer algunas distinciones. Se les denomina "ruegos" a todos los pedidos hechos en forma no interrogativa, dejando los pedidos hechos en forma interrogativa en la categoría preguntas.


4-Las Preguntas: la mayoría de las preguntas de niño a niño piden una respuesta así que se les puede considerar dentro del lenguaje socializado, pero hay que tener cuidado con aquellas preguntas que no exigen una respuesta del otro, ya que el niño se le da solo; estas preguntas constituirían monólogo.

5-Las respuestas: son las respuestas dadas a las preguntas propiamente dichas (con signo de interrogación) y a las órdenes, y no las respuestas dadas a lo largo de los diálogos, que corresponderían a la categoría de "información adaptada". Las respuestas no forman parte del lenguaje espontáneo del niño: bastaría que los compañeros o adultos hicieran más preguntas para que el niño respondiera más, elevando el porcentaje del lenguaje socializado.

En conclusión el lenguaje egocéntrico va disminuyendo con la edad. Hasta la edad de 7 años, los niños piensan y actúan de un modo más egocéntrico que los adultos.

El porcentaje del lenguaje egocéntrico depende de la actividad del niño como de su medio ambiente. En general, el lenguaje egocéntrico aumenta en actividades de juego(especialmente el de imaginación) y disminuye en aquellas actividades que constituyan trabajo. Con respecto al medio social, el lenguaje egocéntrico disminuirá cuando el niño coopere con otros o cuando el adulto intervenga sobre el habla del niño, exigiendo el diálogo.
EDADES: Para Piaget los en los niños menores de 7 años sólo existe comprensión en la medida que se encuentren esquemas mentales idénticos y preexistentes tanto en el que explica como en el que escucha.

Después de los 7 u 8 años del niño, cuando comienza su verdadera vida social, comienza el verdadero lenguaje.
ENFOQUE COGNITIVO:

Posición Constructivista: Las estructuras de la inteligencia incluyen el desarrollo del lenguaje. El sujeto tienen un papel activo en el desarrollo de la inteligencia, en la construcción cognitiva, si un sujeto no interactúa no desarrolla la inteligencia ni el lenguaje.

Piaget ha denominado etapa de las operaciones concretas al período que va de los siete a los once años de edad. El niño en esta fase se caracteriza por la habilidad que va adquiriendo con la percepción de los distintos aspectos o dimensiones de una situación y el entendimiento de cómo tales aspectos o dimensiones se relacionan. El pensamiento presta ahora más atención a los procesos que a los estados. Tales cambios capacitan al niño para manipular conceptos, especialmente si las cosas e ideas que éstos implican no son ajenos a su realidad. Del mismo modo, el habla del niño se hace menos egocéntrica en la medida en que aumenta en él la necesidad de comunicarse y la obligación de reconocer la importancia de su oyente. Esta situación es diferente de la que verbalmente se caracteriza el niño en la etapa anterior o pre-operacional (de 4 a 7 años), en la que el niño trata de satisfacer más sus propias necesidades verbales que las de su oyente. La mayor parte del habla de un niño en esta fase no tiene, según Piaget, intención comunicacional. Así, la actuación verbal tiende a ser repetitiva o de monólogo individual o colectivo.

Las etapas de Piaget son las siguientes:
  • Etapa sensorio-motora (0 a 24 meses): Es anterior al lenguaje.
    Se contempla la existencia de un período holofrástico, e incluso el final de la misma dada por las primeras manifestaciones simbólicas.
  • Etapa Preoperativa (2 a 7 años): Los esquemas comienzan a ser simbolizados a través de palabras (habla telegráfica).

    La última parte de esta etapa supone el surgimiento de la socialización.
    El lenguaje alcanza un grado de desarrollo notorio. Aparición de las primeras oraciones complejas y uso fluido de los componentes verbales
  • Etapa de Operaciones Concretas (7 a 12 años):   Adquisición de reglas de adaptación social.

    Se aprende que es posible transformar la realidad incluso a través del lenguaje.
  • Etapa de Operaciones Formales (12 a 15 años): Surgen verdaderas reflexiones intuitivas acerca del lenguaje, juicios sobre aceptabilidad y/o gramaticalidad de oraciones tratándose de una intuición consciente.